domingo, 27 de junio de 2010

Hoyo Cerrado


¡Por fin Hoyo cerrado! y digo por fin porque esta es sin duda una de las rutas que más tiempo se ha pasado en el apartado de "rutas reserva" por si no surgía nada más interesante. Lo cierto es que la verdadera intención era haberla hecho en invierno para poder darle un tiento a las canales que se forman en esa zona y en la contigua del Hoyo de Pinilla y el Saltadero pero, la mala suerte y las condiciones "peculiares" de este invierno, nos dejaron con un par de intentos y las ganas.
Con un pronóstico del tiempo un tanto amenazante, nos encaminamos Irene, David, Dani, Jesús y un servidor hacia Alameda del Valle donde comienza la ruta. Los coches se pueden dejar sin problema en la pista que sale hacia el norte justo a la entrada de pueblo.
Tras un primer tramo de pista forestal en la que nos entretuvimos intentando no pisar la multitud de ranitas que se nos cruzaban, nos adentramos en un agradable tramo de bosque por el que fuimos remontando hasta la zona del Palancar. A partir de aquí nos tocó ir rebuscando el sendero que se supone que enfila hacia Hoyo cerrado y que se pierde por completo a media ladera.
Prácticmante llegando a la parte alta del arroyo reaparecen los hitos para conducirnos fácilmente hasta las praderas de Hoyo cerrado; lugar idílico de verdes pastos y orondas vacas donde, a buen seguro nos hubiéramos echado una cabezada, de no ser por la amenaza de lluvia . De ahí solo queda subir a la cuerda de Montes Carpetanos por donde nos dirigimos al pico del Nevero. Desde allí, viendo como se nos echaba encima la tormenta, nos dirigimos a uña de caballo hacia el puerto de Malagosto para bajar por el PR20 o al menos por lo que queda de él hasta Peñas Crecientes, donde enlazamos con una especie de cortafuegos que deben haber abierto no hace mucho a base de bulldozer y que nos dejó comodamente en la pista de bajada hasta los coches.





PD: aquí me veo obligado a hacer un pequeño apartado para denunciar a tres cafres que nos encontramos por la zona y que con sus motos de enduro intentaban cruzar el arroyo de Hoyo cerrado más arriba de la zona en que se une con el de la Sauca. No es la primera ni la última vez que se ven estas cosas. Lo grave es que en esta ocasión nos los encontramos por encima de la cota de 1500m, fuera de pista o camino conocido, pisoteando prados y piornales y amargándo la tranquilidad del lugar con el petardeo de sus escapes.

1 comentario:

  1. Hey Pablo! me he fijado que en la muñeca llevabas algo. Es un pulsometro o similar o una simple muñequera?

    ResponderEliminar